¿A qué edad debo llevar a mi hijo al dentista?
Ir al odontólogo debe ser una de nuestras visitas anuales a la que no debemos faltar. Desde que tenemos uso de la razón tenemos en la conciencia que visitar al dentista no debe dejarse para último lugar. Por eso te damos las claves para saber a qué edad debo llevar a mi hijo al dentista.
Pero ¿a qué edad deberíamos haber comenzado a acudir a este profesional de la salud bucodental? Por ello analizaremos a qué edad debo llevar a mi hijo al dentista.
Los bebés recién nacidos
Generalmente cuando un bebé nace, los dientes comienzan a crecer a los seis meses. Por ello es recomendable que desde este momento se empiece a controlar la salud bucodental.
Según las diferentes academias de odontología pediátrica, a partir de que empiecen a salir los dientes es recomendable comenzar las visitas al dentista.
Desde ese momento sería recomendable que nuestro dentista comience a controlar, revisar y asegurarse el buen estado de los dientes de nuestro hijo. De esta forma, nos aseguraremos que cualquier problema o malestar se coja de raíz y no genere molestias mayores, además de crear un hábito y eliminar futuros miedos o fobias.
Primeros diez años de vida
Visitar al dentista de forma regular durante los primeros diez años de vida ayudará a que todos los dientes definitivos vayan saliendo con normalidad y en buen estado.
Es fundamental acudir tras la erupción de las primeras muelas definitivas, pilares de la mordida, donde se valora el estado del hueso.
Los tratamientos de ortodoncia interceptiva y ortopedia en la infancia nos asegurará resultados más óptimos y rápidos debido a que el paciente se encuentra en crecimiento y será más fácil controlar el estado de los huesos.
Pero, no solo hablamos de la salud dentaria, sino que hay otros muchos beneficios en llevar a nuestros hijos al dentista desde una edad temprana:
- El habla: los dientes influyen en la forma de hablar. Alguno de los ejemplos más comunes son el apiñamiento, los problemas al cerrar la boca o tener un mal hábito relacionado con la posición de la lengua respecto a los dientes.
- La nutrición: la forma en la que masticamos puede ser crucial para mantener una buena nutrición. Por lo que todo está relacionado directamente con los dientes.
De esta forma, cuando nuestros hijos comienzan a visitar al dentista vamos asegurándonos de que todo lo que está relacionado con los dientes y la forma de morder, va sucediendo con normalidad.
Dientes de leche
Además, no debemos olvidarnos de que durante esta etapa de la vida los dientes de leche se caen para dejar que los definitivos vayan saliendo.
Los dientes de leche, que preceden a los definitivos, se encargan de guardar su espacio para estos últimos y por ello tenerlos en buen estado es muy importante.
No debemos olvidar tampoco que en el caso de recibir un golpe muy fuerte en los dientes de leche, debemos llevar a nuestro hijo a que visite a un odontólogo pediátrico que compruebe que el diente no está dañado.
La adolescencia
En esta etapa de la vida, los dientes de leche terminan de caer, dejando paso a los definitivos. Tras la erupción de todos los dientes es el momento para valorar la ortodoncia, en el caso de que sea necesaria, antes de que el problema se agrave.
Además de todos esos motivos, llevar a nuestro hijo al dentista desde pequeño es muy importante para poder enseñarle una buena salud bucodental y para que aprenda la importancia de mantener un buen control en el dentista.
En nuestra Clínica Montaño Herrera contamos con profesionales de la odontología pediátrica que podrán comenzar a valorar la salud dental de tus hijos. ¡Pide tu cita!